La ministra de Capital Humano, Sandra Petovello, esquiva a la justicia, no presenta un plan de entrega de los alimentos a los comedores populares y avanza en la distribución de estos a escuelas, aunque tampoco especificó a cuales.
“Se comunicará a la brevedad acerca de las escuelas receptoras como así también las cantidades de productos y fechas exactas de entrega de los alimentos”, aquí una parte de la comunicación oficial del Ministerio de Capital Humano al juzgado del Juez Casanello. Lo hizo tarde y sin especificar todavía el cronograma y sus destinatarios.
El gobierno no renuncia a la compulsa que mantiene con las organizaciones sociales, no mandará alimentos en medio de una crisis alimentaria que comienza a mostrar largas procesiones en los barrios populares en busca de un plato de comida.
“Los alimentos restantes existentes en los depósitos van a ser distribuidos a las escuelas vulnerables de todo el país. Se considera escuelas vulnerables a aquellas que presentan estudiantes con altos niveles de riesgo infantil y bajos índices de desempeño educativo y socioeconómico”, continúa el comunicado.
Recordemos que el comienzo del reparto de alimentos se articuló con la organización CONIN, del polémico pediatra Abel Albino.