Por Ezequiel Arauz, concejal
Milei tuvo su primer éxito legislativo. Si bien es cierto, negoció y resignó, consiguió una amplia mayoría parlamentaria, sumando como propio al bloque Pro, y con algun matiz sobreactuado, tambien a la UCR. Sin embargo, por origen, por votos en la general y por la características y formas de desplegar su política, el gobierno todavía no puede estabilizarse y se desgasta en sus batallas iniciales, que elige dar a fondo.
El proceso legislativo de la Ley Ómnibus se dio con un fuerte oposición del peronismo expresado en UxP, en la calle con la CGT a la cabeza y su contundente convocatoria del 24 de enero y en el parlamento casi sin fisuras, a excepción de Tucumán y los diputados dem gobernador Jaldo.
En paralelo, comienza a impactar en los bolsillos la combinación de una «devaluacion Caputo» de 118% en tandem con la nula politica de mejoramiento de ingresos, catalogadas como delito desde la campaña por Milei.
Ese primer paso del gobierno, que tras de su credo y en la búsqueda de un capitalismo iniciatico e ideal, libre de la más mínima regulación estatal, en el que los jugadores -fuertemente monopólicos hoy en nuestro pais- , se mueven sin límite a la libre competencia, es el elemento central a seguir.
La primeras señales del mercado muestran que los precios siguen escalando a niveles de estampida y alejándose del poder de compra popular. La inflación terminaría así por ausencia de demanda. Mientras esa distancia no se acorte, el gobierno estará lejos de estabilizarse, por aliados que coseche. Encima, Milei promete una etapa estanflacionaria, es decir que las turbulencias van a continuar por largo tiempo.

Foto: última Hora
Mientras, la ley pasará el debate del articulado, donde se prevén nuevas modificaciones y después ira al senado. Para su aprobación o, eventualmente, para su retorno a la cámara baja. En paralelelo UxP ya reclama comenzar a tratar el mega DNU.
La CGT por su parte, y en una postura disimil a la que tuvo en 2015 y 2016, anunció nuevas medidas para expresar su oposición a la ley con media sanción. Los tres días de debate en el congreso, mostraron un gobierno que de la mano de Bullrich esta dispuesto a reprimir a convocatorias menos numerosas y más espontáneas, referenciadas sobre todo en partidos y agrupamientos de izquierda. Se trata de una decisión lógica que cumple las promesas oficiales de campaña y aun asi, sumamente riesgosa, repudiable y antidemocrática.
Volviendo al debate en la sesión, fue Máximo Kirchner quien dijo que nuestro pais atraviesa una «crisis de deuda» (idea que fue retomada en un comunicado posterior que difundimos desde el Ateneo NK, el PJ y UxP locales). Ese definición pone en seria cuestión el relato oficialista – de todo el oficialismo, votante del último acuerdo no por casualidad – que fija como único problema al déficit, un ejercicio que torna las consecuencias en causas y esconde a sabiendas al rol del FMI como espada de damocles para la soberanía y el pueblo argentino.

Foto: Diario Río negro
Milei consiguió en el balotaje una amplia ventaja sobre el peronismo. Tiene esa legitimidad indiscutible y ahora añade el apoyo de casi el conjunto de lo que era Cambiemos.
Pero, su ofensiva inicial (DNU, Ley Ómnibus, devaluacion y protocolo represivo) configura una suerte de reforma constitucional de prepo, que los votos de la general no justifican de ninguna manera y las formas contradicen.
Esa ofensiva a todo o nada abre una una pulseada que alinea a los diversos actores públicos. El oficialismo «ampliado» a un lado y UxP del otro, encabezan polos de confrontación con objetivos estratégicos claros en pugna. Los tiempos los marcará el pueblo, no hay que adelantarsele, ni tampoco reemplazarlo. Tampoco podemos permitirnos, como militantes de campo nacional y popular, de peronismo, del kirchnerismo, dejarlo solo y sin horizonte en la batalla. Así será. La Patria no se Vende.
Foto de tapa: Radio Gráfica