El secretario de transporte, Franco Mogetta, anunció que el valor del pasaje en transporte automotor aumentará, aunque dijo que será “gradual o responsable”.
Mientras la motosierra ataca al sector público con una voracidad nunca vista, la licuadora continúa su parte del trabajo y sigue erosionando el poder adquisitivo de las y los trabajadores.
Las boletas de luz y gas han puesto a la clase media entre la espada y la pared, las subas, que en algún caso alcanzaron el 800%, son solo una porción del ataque al bolsillo, a esto hay que sumar los aumentos en comunicaciones (internet, telefonía móvil y cable), la actualización de las cuotas de los colegios privados y ahora, hay que meter en la bolsa el boleto del bondi.
El sector empresarial esperaba que el gobierno incrementara los subsidios para mantener el mínimo en 280 pesos, para esto deberían haber desembarcado desde el ejecutivo nacional unos 20 millones de pesos, eso no sucedió ni sucederá.
El gobierno anunció la fase 2 y esto significa, cero emisión y más recorte.
El secretario le dijo a Cadena 3: “Nosotros, desde que llegamos a la Secretaría de Transporte de la Nación, hemos incrementado el pasaje del AMBA como no se ha hecho en los últimos 20 años. Hemos logrado el descongelamiento inmediatamente al asumir y luego dimos el salto grande donde ya hemos equiparado ahí en ese momento a las tarifas que se pagaban en el interior del país. En estos próximos días estaremos comunicando una actualización de tarifa en el AMBA. Siempre de manera gradual y responsable, con el proceso de eficientización que hemos arrancado en el Gobierno Nacional”.
Ahora bien, si fuera por el sector, el valor rondaría muy por arriba de los 800 pesos, pero el gobierno, sin recortar lo que hoy gasta en subsidios, y sencillamente sin incrementarlos, generaría que el boleto mínimo llegue a los 485 pesos, un 80% de aumento, que además sería gradual.
