Murió el genocida que era dueño del Colegio San Diego en Wilde

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Durante décadas fue impune, junto a su mujer fundaron el Colegio San Diego en la localidad de Wilde, partido de Avellaneda, su nombre era Luis Horacio Castillo y desplegó sadismo y brutalidad en el Infierno y el Pozo de Banfield, dos Centros Calndestinos de Deención que funcionaron en el conurbano sur.

Castillo se retiró en 1986 de la Policía Bonaerense y se dedicó administrar y dirigir junto a su esposa el Colegio San Diego, el cual habían fundado en 1979, pero en 2022 el Juez Kreplak lo procesó por los delitos de secuestros, tormentos, desaparición de personas, homicidios y abuso sexual durante la dictadura.

Dos años después, en marzo de 2024, y gracias a los testimonios de sobrevivientes y familiares, el presidente del Tribunal, Ricardo Basílico, junto a los jueces Esteban Rodríguez Eggers y Ealter Venditti lo sentenciaron a cadena perpetua, junto a otros nueves genocidas, por los delitos de abuso sexual, privación ilegal de la libertad y homicidios calificados,

Fueron 60 hechos comprobados de torturas y secuestros, entrelas víctimas estaban las y los chicos de la Noche de los Lápices.

No cumplió su pena en una cárcel común, murió el domingo en prisión domiciliara. Cuando fue denunciado, en vez de hacerse cargo, prefirió presentar una denuncia millonaria en la justicia por calumnias y daño moral.

El colegio sigue funcionando y son cientos las y los chicos que concurren cada día, por suerte y gracias a la justicia, sin el genocida dentro y con una historia saneada.

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