El secretario de seguridad porteño, Diego Kravetz, pidió no dar alimentos a las personas en situación de calle porque los “acomodas en la pobreza y es un circuito no virtuoso».
Mientras la situación económica dispara solo indicadores catastróficos, el gobierno porteño, que mantiene políticas represivas e indignas para con las personas que viven en la calle, salió a pedirle a las y los vecinos que no ayuden a los sectores más vulnerables.
«Hay distintos tipos de personas en situación de calle. Los que son complicados son los que hacen rancheadas porque suelen hacer cosas ilícitas (…) Hay un montón de personas en situación de calle con problemas psiquiátricos y de adicciones, a ellos hay que abordarlos de otra manera», señaló Kravetz.
Kravetz, en total sintonía con la línea cuasi libertaria de Jorge Macri, sostiene un plafón filosófico e ideológico que no solo margina, sino que busca desterrar a las personas que se han quedado sin un techo.
A lo largo de estas semanas, aun en publicaciones oficiales, el gobierno ha mostrado como un hecho positivo las distintas acciones que implican la persecución de personas que viven en la calle.
Distintos operativos que constan en quitarle las pocas pertenencias que tienen y echarlos de los lugares donde pueden pasar las noches y después “desinfectar” esos lugares.
En este sentido y buscando legitimar estas acciones violentas y denigrantes, Kravetz afirmó: «Es difícil la convivencia. Es chocante para una persona tener a alguien viviendo en el palier de su edificio», y agregó de forma despectiva: «Si como vecino le das un plato de sopa caliente a la persona que vive en la calle, lo acomodas en la pobreza y es un circuito no virtuoso».