Con un gobierno anarco libertario que se ha corrido de políticas públicas que busquen frenar esta brutalidad, se conoció, según organismos internacionales como la CEPAL, Naciones Unidas y la OEA, la cifra de femicidios del año 2023, fueron 250 y registra un aumento del 10,6% con respecto a 2022.
Estos datos, proporcionados por el Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina (RNFJA), muestran una suba con respecto a 2022, en torno a “muertes violentas de mujeres cis y trans/travestis por razones de género”, y también un descenso con respecto a cifras pre pandémicas, donde el número fue de 260 femicidios.
El informe aclara que esta es “la cifra oficial del estado argentino en la materia, informada a los organismos especializados de Naciones Unidas, la OEA y la CEPAL, entre otros”.
De este informe se desprende que “los datos recolectados desde 2014 muestran una estabilidad considerable en las tasas de femicidios directos. De una tasa inicial de 1,03 víctimas directas de femicidio cada 100.000 mujeres en 2014, se pasó a una de 1,05 en 2023, solo con niveles apenas menores en 2021 y 2022”.
Desde 2013 hasta 2023 “se informaron al menos 2.446 víctimas directas de femicidio, un promedio de casi 245 por año”, números estos proporcionados a la CSJN. El dato más doloroso es que el que señala que “estas víctimas tenían 205 niñas, niños y adolescentes a cargo”.
Es preocupante este incremento del 10,6% y también lo es tener en el gobierno una expresión negacionista de la desigualdad de género. El libertarismo, expresión económica que busca destruir la concepción de estado tal como lo conocemos hasta aquí, trae consigo, que en este transitar las políticas que busquen igualdad de género y por ende, terminar con los femicidios, agraven la situación.
Como dice el refrán “para muestra alcanza un botón”. Esta semana el senador nacional por Formosa de La Libertad Avanza, Francisco Paoltroni, estuvo invitado a uno de las radios con más encendido de este momento. Allí el libertario fue consultado por esta problemática y su respuesta dejó claro cual es el posicionamiento de la fuerza gobernante.
En este 2024, el lesbicidio sucedido en el barrio de Barracas, en una pensión que alberga personas con pocos recursos, donde perdieron la vida tres mujeres y otra recibió profundas heridas, luego que su compañero habitacional las encendiera fuego enojado por la orientación sexual de estas mujeres, despertó el estupor y encendió alertas en las militancias por las diversidades, además de exhibir la peor cara del gobierno libertario cuando el vocero presidencial, esquivó el término “lesbicidió” y prefirió encuadrar el drama en un hecho de violencia más.
Habrá que esperar para saber como termina este 2024, sin Ministerio de las mujeres y con discursos de odio direccionados a las diversidades y en contra de las políticas de igualdad de género.
Footo: La Tinta