El JP Morgan desistió de darle un crédito al gobierno de Javier Milei y el riesgo país se fue otra vez para arriba

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Finalmente, el famoso salvataje de bancos norteamericanos al gobierno de Milei no será posible, aunque fue anunciado con bombos y platillos el JP Morgan anunció que no sucederá y elevó el índice de Riesgo País dejándolo al borde de los 650 puntos.

Hace días le preguntaron a Javier Milei por su insistencia en no acumular reservas, pese a que es una obligación hecha desde el Fondo Monetario Internacional, el presidente sostuvo que no era necesario ya que las políticas desplegadas pueden evidenciar un crecimiento de la economía y un buen manejo de las finanzas, y que estos dos componentes harían que nuestro país tuviera un fuerte acceso al crédito gracias la baja del riesgo país, lo que generaría la posibilidad de rolear los vencimiento de deuda y acceder a deuda para engrosar las reservas del Banco Central de la República Argentina.

La fuerte suba que experimentó el Riesgo País puede linkearse con la decisión del JP Morgan de no otorgar un crédito por 20 mil millones de dólares anunciado por el gobierno libertario y sus alfiles mediáticos. El mismísimo Luis Toto Caputo, ministro de Hacienda, quiso despegarse de ese anuncio afirmando que nunca salió desde su cartera, sin embargo, sus declaraciones en los canales de stream afines lo desmiente y lo dejan en evidencia.

«Nunca hablamos con los bancos de un rescate, ni de 20 mil millones. Es una ‘operación’ más con la sola intención de generar confusión», publicó en sus redes el ministro ex macrista, hoy ultra libertario.

Caputo sostuvo que existía una negociación con varios bancos de EE UU, donde se encontraba el JP Morgan, pero también entidades como el Bank of America y Citigroup. Sin embargo, no ahondó en el crédito que nuestro país debería recibir para afrontar vencimientos cercanos a los 5 mil millones en el mes de enero de 2026.

Envalentonado por la victoria de octubre, el gobierno avanza en reformas estructurales que incluyen la penal, fiscal, laboral y que en las últimas horas han sumado una polémica reforma educativa. Todo este ruido político, que seguramente impactará en la gestión libertaria genera dudas sobre su transitar en los dos últimos dos años que le quedan al frente del ejecutivo.

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